ñaca ñaca

Confusión!
Qué mierda está pasando. No tener idea. Hoy en la mañana, al levantarme de la cama, sentí lo de todas las mañanas, lo que ocurre después de un largo sueño y una vejiga que ya es casi incapaz de aguantar algo más de orina. El baño tenía que ser mi primera parada. Las legañas eran como UHU en los ojos, mi tufo era peor que el de Munrah y mi cara estaba más arrugada que un Sharpei. Le achunté a la manilla de la puerta, levanté la tapa y evacué. Evacué con gusto, de esas donde la cabeza se va para atrás y a las rodillas les da cosquillas. Tiré la cadena y cuando me iba a lavar las manos, me espanté. Cuando miré al espejo, lo único que vi era la puerta que estaba detrás de mi. Más asustado que una oveja cerca de Ladislao abrí la puerta del baño y corrí a la pieza de mi hermano, para salir de cualquier duda. Abrí la puerta sin delicadeza alguna y mi hermano abrió los ojos llenos de rabia y me dijo:
-Qué te pasa pelotudo!
-Perdón...
Y cerré la puerta.
Esto era raro, mi hermano me veía, pero yo no veía mi reflejo en el espejo.
He escuchado historias donde ocurre esto... pero no estoy seguro... no quiero estarlo.